UNA PERSPECTIVA RELIGIOSA

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En el siglo XXI y gracias a los avances tecnológicos es más fácil el acceso a la pornografía, pero no es la única perspectiva que debemos analizar, pues existe otro punto de vista que la gran mayoría piensa está totalmente en contra de el porno. Como por ejemplo la religión, en esta ocasión no se hablará de una en específico, será algo en general.

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En una entrevista realizada a un cura, afirma que este tipo de prácticas la iglesia no las ve como un pecado, pues es común que las personas en algún momento de su adolescencia tengan curiosidad por conocer acerca de este tema, pero según este padre lo que causa la pornografía es mostrar al humano como un objeto sexual y lo que pretende la iglesia es mostrar que esto no es así.

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Pues desde un principio se ha tomado al ser humano como un ser de bien, hace muchos años atrás el tema de la sexualidad era un tabú, no existía la misma accesibilidad al internet, por el contrario, la forma de acceder a el porno era mediante revistas y canales privados. En la época de nuestros padres difícilmente nos hablaban del tema. Aunque una gran diferencia de esas épocas a las actuales es que las mujeres eran vírgenes hasta el matrimonio y se casaban al cumplir la mayoría de edad, o cuando sus padres lo exigieran.

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Retomando el tema de la religión, en la biblia no se toma el tema de la pornografía como tal, pero sí relaciona algunos de sus conceptos religiosos con este tema. Algunos de estos son el adulterio y el deseo por la carne, pues según la iglesia mirar a otra mujer con un deseo sexual lo puede llevar a cometer adulterio y esta misma definición se puede asociar al deseo por la carne.

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En la búsqueda de respuestas a la pregunta si el porno es un pecado. “Uno puede aprender a odiar la pornografía si piensa detenidamente en las terribles consecuencias de este perjudicial vicio. Un estudio reciente publicado por la Universidad del Estado de Utah indicó que la pornografía produjo en algunos usuarios “depresión, aislamiento social, relaciones dañadas” y otros efectos lamentables. Es más, dado que ver pornografía ofende a Dios —como se explicó antes—, tiene una consecuencia mucho peor: aleja a la persona de su Creador.” (Testigos de Jehová, 2013)

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En algunos casos sí podría llegar a pasar lo nombrado anteriormente, pero depende de la persona y como se encuentre su situación psicológica, esta última influye más que cualquier otro aspecto ya que si nos encontramos en una situación difícil internamente muy fácilmente podemos dejarnos afectar de las cosas que pasen a nuestro alrededor.

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La pornografía como tal no es un pecado, ya que en ningún momento se nombra como tal la pornografía en la biblia. Son conceptos que relacionamos a la religión por medio de nuestras experiencias.